Pasado-presente.
Por Carlos Bayón.
He debido quedarme dormido y en sueños viajar hasta el año 87, donde todavía triunfan los cardados imposibles y la laca no era un problema para la capa de ozono. Allí bien podría haberme encontrado con estos suecos que también deben haber viajado en el tiempo para coger todas las influencias y sonidos y grabar este disco para editarlo en 2019. Aquí hay todo lo que en muchos caso añoramos en estas fechas, coros, estribillos coreables, melodías, todo lo que se supone se le tiene que pedir a un disco de Hard Rock, da igual si bueno o malo, y de todo esto hay mucho y bueno en el nuevo disco de los suecos Crazy Lixx.
He de reconocer que de sus cuatro disco anteriores sólo he escuchado el “Ruff Justice”, que inmediatamente pasó a ser uno de mis favoritos, pero los otros, por las razones que sean, nunca me han llamado la atención, quizá por saturación de discos similares y preferir la novedad.
En este “Forever Wild” continúan con lo que ya ofrecían en su anterior obra, temas cañeros para abrir boca como las iniciales “Wicked” y “Break Out”. Temas macarras, divertidos, perfectos para abrir los conciertos. Temas más melódicos como “Silent Thunder” donde bajan un poco el pedal, sobre todo en el estribillo que es donde se vuelven más melódicos, aunque las guitarras siguen dando caña.
En “(She´s Wearing) Yesterday´s Face” vuelven al sonido macarra y chulo, con una aire a Skid Row pero algo menos punk, los coros acompañando a la voz principal hace que no sea fácil quitarte la melodía de la cabeza.
Elegante es la palabra que te puede venir a la mente cuando empieza a sonar “Eagle”, medio tiempo sobrio, pausado, que no lento, donde las melodías y los coros vuelven a tener capital importancia, la letra es más típica que los bailes regionales pero no se le puede pedir todo y en los 80 cantábamos cualquier cosa sin tener ni idea de inglés, así que no nos vamos a poner quisquillosos.
Con un comienzo un poco raro, in crescendo hasta llegar a las guitarras, entra “Terminal Velocity” donde Danny Rexon vuelve a darlo todo en un tema que suena bastante típico y tópico en el que las guitarras y la batería se endurecen, en ocasiones sonando algo tribal y los coros vuelven a ser excelentes como en todo el disco.
“It´s You” es para mí la mejor del disco, AOR del bueno con una melodía muy alegre y un estribillo que se te queda pegado como un chicle, aquí sí que nos vamos a acordar de muchos, desde Danger Danger, a los primeros Treat o Fate, a Bon Jovi, sobre todo en el solo, vamos un temazo, en su momento hubiera sonado en todas partes y seguro que hubiese sido un éxito.
Llegados a este punto no podía faltar la balada de turno, reconocible a distancia e intercambiable por cualquier otra que te venga a la mente, sentimiento no le falta y te mete de lleno en ella la forma de cantarla de Danny, en directo veo el típico momento de ir al baño o a por bebida. No está mal pero acaba siendo demasiado típica y un poco larga.
Para que no nos pongamos ñoños rápidamente volvemos a la caña con “Weekend Lover”, con otro buen estribillo que salva una canción, por lo demás bastante normalita, pero es que la media va bastante alta.
El disco se cierra con “Never Die (Forever Wild)”, que engaña con su comienzo cadencioso pero que rápido coge velocidad, con otra letra de autoayuda y que viene muy bien como cierre incluso para los conciertos, la batería va a toda velocidad y las guitarras vuelven a la dureza del principio, lo dicho muy buen tema de cierre.
Para mí uno de los mejores discos que he escuchado en lo que llevamos de año y si queremos dejarnos llevar por la nostalgia de otros tiempos aquí vamos a encontrar buen Hard-AOR y que seguro te hará volver a querer escuchar todos esos discos que han inspirado e influido a estos suecos.
Estoy seguro, porque me ha pasado, que en el momento que empieces a escucharlo va a ser difícil quitártelo de tu reproductor, además en un disco que no cansa ni aburre aunque lo escuches a menudo y seguro que a cada pasada le vas a encontrar nuevos matices.
Lo dicho, joya ochentera en el siglo XXI que no debemos dejar pasar y de paso, por lo menos en mi caso, no cometer el pecado de pasar de sus obras anteriores. Me lo apunto en las tareas pendientes.
CRAZY LIXX:
DANNY REXON: Voz
CHRISSE OLSSON: Guitarra
JENS LUNDGREN: Guitarra
JENS ANDERSON: Bajo
JOÉL CIRERA: Batería